Con lo ocurrido en Pataz, hace algunas semanas, y con otros eventos violentos y lamentables que siguen ocurriendo, es necesario preguntarnos si las entidades de inteligencia realmente están cumpliendo sus funciones y si tienen algún plan estratégico, tal que, según sus plazos, puedan garantizar a la ciudadanía que se está previniendo estos actos de violencia, y con ello garantizar la paz y la seguridad a nivel nacional, y si además está dando resultados el cuidado y protección de los bienes críticos a nivel nacional. Y cuando ya está ocurriendo las incidencias, ¿cuál es el resultado de sus acciones para neutralizar, controlar y eliminar el evento delictuoso?-
Para mejor tratar este tema describiremos la estructura del Sistema de Inteligencia Nacional (SINA), entidad que a la vez forma parte del Sistema de Defensa Nacional.
De las páginas de la DINI, se advierte que los objetivos de la Inteligencia Nacional son:
• Producir el conocimiento útil para el proceso de toma de decisiones en materia de seguridad nacional.
• Proteger las capacidades nacionales frente a acciones de inteligencia u otras encubiertas provenientes de actores que representan amenazas a la seguridad nacional.
• Realizar actividades destinadas a alcanzar la seguridad digital en materia de seguridad nacional.
Y se enuncia que los componentes de este Sistema de Inteligencia Nacional son los siguientes:
Conformación del Sistema de Inteligencia Nacional (SINA)
• Consejo de Inteligencia Nacional (COIN)
• Dirección Nacional de Inteligencia (DINI)
• Órgano de Inteligencia del Sector Relaciones Exteriores
• Órganos de Inteligencia del Sector Defensa
• Órganos de Inteligencia del Sector Interior
PRESUPUESTOS ASIGNADOS A LAS UNIDADES DE INTELIGENCIA
Es importante indicar los presupuestos asignados a cada órgano de inteligencia así, para el 2024 se destinaron los siguientes montos:
DINI: Presupuesto asignado de S/ 73 millones. De este monto S/ 25 millones se destinaron para “otros gastos”.
Aún más, en setiembre de 2024 se dispuso transferir hasta S/ 30 millones, es decir, se aumentó en un 40% el presupuesto.
Para el año 2025 se ha destinado un presupuesto de S/ 101 millones. Debiendo resaltar que S/ 55 millones (55%) está destinado a “Otros Gastos”.
Teniendo en cuenta que no hay resultados, según los objetivos trazados por la institución, cabría preguntarse, ¿en qué consisten los montos asignados a “otros gastos”?, consideramos que la ciudadanía tiene derecho a saber cómo se está gastando el dinero de todos.
Este es un tema sensible, pues de por medio está garantizar la seguridad y paz en el país, más aún cuando estamos a puertas de un año electoral, el cual desde ya se avizora sumamente peligroso, pues ya se ha insertado en la política intereses de la minería ilegal, organizaciones criminales, partidos políticos indebidamente inscritos y candidatos con denuncias de por medio.
A todo ello se suma el temor y la desconfianza ciudadana, respecto de que se podría usar algunas instituciones para atacar a partidos o personalidades incómodas a los intereses de quienes manejan dichas instituciones. Esto puede llevar a que empiecen los reglajes, seguimientos e interceptaciones de comunicaciones ilegales o “chuponeo”, a toda persona incómoda a los intereses de quienes manejan estas instituciones.
¿Qué hacer ante este preocupante escenario de cara al próximo proceso electoral?.
