Cansancio, ansiedad y sufrimiento se reflejan en su rostro.
Sus resecos labios están sedientos. De sus pómulos y mejillas brota su preciosa sangre que limpia el pecado.
La impotencia nos embriaga por evitar su padecimiento.
La sagrada imagen del Nazareno es único en Cañete. Es una réplica hecha por el escultor ayacuchano Hedy Mora, gracias al esfuerzo de la comunidad católica que puso el hombro por conseguirlo.
En esta Semana Santa se puede apreciar participando en los solemnes cultos que se desarrollará en la iglesia Jesús Nazareno del Centro Poblado de Nuevo ayacucho.
