¡La Contraloría llama la atención al alcalde y al Concejo Municipal! El informe N°25953-2024-CGPREVI-SOO revela una alarmante realidad: a tan solo 22 días de cerrar el año, el Municipio Provincial de Cañete muestra un desalentador avance del 60.2% en la ejecución general de su presupuesto y un preocupante 47.4% en lo que respecta a obras. Esta cifra significa que millones de soles destinados a mejorar la calidad de vida de la población se han quedado en el papel, sin que se traduzcan en mejoras concretas para los ciudadanos. ¿Qué implica este retraso?
• Menos obras ejecutadas: Las obras planificadas, que son esenciales para el bienestar de la comunidad, están lejos de materializarse.
• Metas incumplidas: Las promesas de desarrollo y mejora en servicios públicos se quedan en el aire.
• Servicios básicos y mejoras en infraestructura que seguirán esperando: Agua potable, saneamiento, y infraestructura vial siguen siendo una asignatura pendiente. Proyectos cruciales paralizados: Entre los proyectos que podrían transformar la vida de cientos de familias, encontramos:
• Mejoras en agua potable y alcantarillado en diversas zonas de la provincia.
• Construcción de muros de contención en áreas de alto riesgo.
• Mejoras en la transitabilidad vial, especialmente en accesos clave.
• Renovaciones en servicios educativos que impactan en el futuro de los jóvenes.
• Mejoras en espacios deportivos, cruciales para la salud y el esparcimiento de la población.
¿Qué está fallando? La Contraloría ha señalado a José Tomás Alcántara Malásquez, alcalde de Cañete, y al Concejo Municipal como los principales responsables de este retraso. Ellos tienen la obligación de garantizar que los recursos públicos se utilicen de manera eficiente y oportuna. Sin embargo, el incumplimiento de estos compromisos está afectando directamente a la población.